El mundo que vendió a sus habitantes

Qué es un mundo sin sus habitantes como gracia.

Pero hay uno que no los soporta, no es por lo particular de su naturaleza. Ya que en está radica un hermoso complemento. 

Realmente es lo que hace desvariar las decisiones de tan singulares habitantes, es algo que para muchos parece incierto. Pero hay algo que corrompe totalmente tan singular existencia. Y es la desición oscura que empalaga  encarcelando el corazón y el pensamiento de estos habitantes. 

Incrustado un precio en la existencia de estos desdichados, sólo basta ver la altura de su mirada, para saber qué tan arrogante existencia de lo que por naturaleza fue creado como bueno, transformó tal excelente creación, en un simple escaparate.

¿Quién entenderá el valor real?